Oraciones a San Cipriano para enamorar | Muy poderosas

En esta ocasión vamos a compartir contigo tres oraciones muy poderosas hacia San Cipriano que son para atraer el amor a nuestra vida. Es una oración que resulta extremadamente útil para todas aquellas personas que han perdido al amor de su vida, para aquellas personas que no han podido encontrar a su pareja ideal.

Esta oración a San Cipriano se tiene que realizar con una gran fe, devoción y amor, consiguiendo que así el les pueda conceder esto que tanto están buscando: el amor puro de una persona.

La oración es muy útil para que una nueva persona entre a nuestra vida o que una persona que ya conocemos pueda notar los sentimientos que tiene hacia nosotros. Lo cierto es que se trata de una oración realmente poderosa, en la cual se recomienda encender una vela de color morado para poder darle luz a nuestra oración y así conseguir que sea más poderosa para poder conseguir nuestro objetivo amoroso más fácilmente con la ayuda de San Cipriano.

Oración a San Cipriano para que un amor regrese

Tú que eres bendito, San Cipriano,
te pido que alejes a ____ (Nombre de la persona)
de su amante,
para que sus ojos solo puedan verme a mí,
para que me dedique cada momento
solo a mí, hoy y todos los días.

Que siempre quiera estar junto a mí,
que se dé cuenta de que soy
la mejor pareja para ella/él,
que no pueda vivir sin mí,
que la idea de estar lejos de mí, se sienta solo/a,
que en todo momento me tenga en sus pensamientos.

Te suplico que en donde sea que esté,
o con quien sea que esté, que siempre me busque a mí,
que al dormir por las noche sueñe conmigo,
que en las mañanas yo sea su primer pensamiento,
que en cada momento del día,
yo siempre esté en sus pensamiento,
para que pueda sentirme, tocarme,
olerme, mirarme y amarme, como antes lo hacía.
San Cipriano, te ruego que:
______ (Nombre de la persona)
no sienta el deseo de estar con otra persona,
que al estar con él/ella sólo esté pensando en mí,
para que pueda regresar a mi lado lo antes posible,
siempre estar en mi vida y en mis brazos,
que su cuerpo sólo me pertenezca a mí.

Te doy las gracias San Cipriano,
tú que me has concedido este deseo,
que _____ (Nombre de la persona)
regrese para estar en mis brazos con cariño y amor,
con compasión, felicidad, entrega y deseo.

Yo en agradecimiento,
divulgare tu nombre ante todos
aquellos que necesiten de tu ayuda.

Amén.

Oración a San Cipriano para que regrese mi esposo/a o pareja

Con tu inmenso poder, San Cipriano,
y con las medallas que te protegen,
te pido que intercedas ante mí para que
_______ (Nombre de la persona)
regrese a formar parte de mi vida,
para que vuelva a estar conmigo
y que mi dida pueda estar llena de amor, pasión y deseo,
y que me pida una disculpa por la forma en la que em trato,
por mentirme y engañarme,
por lastimarme de la forma en que lo hizo,
y que desde su regreso empecemos
una nueva vida con mucho amor, sinceridad y respeto.

San Cipriano, en ti confío,
para que me puedas conceder,
este milagro que te estoy pidiendo.
Que así sea.

Amén.

Oración a San Cipriano para atraer el amor nuevamente

Oh, San Cipriano,
me presentó ante ti para suplicarte que
______ (Nombre de la persona),
olvide y deje a esa otra persona con la que está,
que solo piense en mí y que sólo me quiera a mí.

San Cipriano, te pido que me concedas este deseo,
que se olvide de todo lo demás y regrese a mi lado,
que solo quiera estar junto a mí,
que quiera compartir una vida a mi lado,
que se de cuenta de que
soy el único hombre/mujer con el que debe estar
por el resto de su vida, asegúrate de ello,
San Cipriano.

Asegurate de que
_____ (Nombre de la persona)
no pueda siquiera descansar,
sin importar en dónde sea que esté,
que siempre me tenga en sus pensamientos,
que siempre forme parte de su corazón.

Que cuando se acueste piense en mí,
que cuando se levante piense en mí
que siempre quiera estar conmigo,
en todo momento a mi lado.

Oh, San Cipriano, te pido que
me concedas este milagro que te pido,
que _____ (Nombre de la persona),
regrese para estar a mi lado.

Yo divulgare tu nombre a donde sea que vaya,
llevándolo siempre conmigo, a todo lugar.
Tráelo/a de forma permanente a mi vida,
que esté completamente dedicado a mí,
que sea fiel, respetuosa y que siempre esté llena de amor,
para que nuestro noviazgo o matrimonio,
pueda ser feliz y vivir con gran amor,
por el poder de tu medalla.
Que así sea.

Amén.

Recuerda que son oraciones que se tienen que hacer con una gran fe y una gran devoción para que realmente puedan ser efectivas y podamos tener la gracia de San Cipriano para que nos ayude a estar con la persona que tanto amas.

Cómo rezar con gran fe Oraciones para dominar el amor

La oración es una de las herramientas más poderosas que tenemos para conectarnos con lo divino y, sin embargo, muchos de nosotros no sabemos cómo rezar con gran fe. Puede que nos hayan enseñado la mecánica de la oración, pero no cómo abrir realmente nuestros corazones y dejar que entre la luz del amor.

El primer paso para rezar con gran fe es comprender que la oración es una conversación con Dios. No somos nosotros los que le hablamos a Él, sino que es una conversación bidireccional en la que escuchamos y hablamos.

Cuando rezamos, abrimos nuestro corazón y nuestra mente a Dios y le invitamos a entrar en nuestra vida. Le ofrecemos nuestras alegrías y penas, nuestras esperanzas y temores, y le pedimos que nos guíe. Y al hacerlo, empezamos a ver el mundo a través de sus ojos.

Una de las mejores maneras de aprender a rezar con gran fe es estudiar las oraciones de los grandes místicos y santos. Estas oraciones magistrales están llenas de amor, y pueden enseñarnos a abrir nuestros corazones a la Divinidad.

Otra forma de desarrollar una vida de oración de fe profunda es encontrar un director o maestro espiritual. Se trata de alguien que puede ayudarnos a entender las enseñanzas de la Iglesia y cómo aplicarlas a nuestra vida.

Por último, podemos recurrir a las grandes oraciones de la Biblia. Los Salmos están llenos de hermosas oraciones que pueden enseñarnos a hablar con Dios desde lo más profundo de nuestro corazón.

A medida que aprendemos a orar con gran fe, descubriremos que nuestras oraciones son cada vez más poderosas. Seremos capaces de llegar a Dios de maneras nuevas e íntimas, y nuestro amor por Él se hará más profundo y más fuerte.