Tal y como se menciona en la biblia, los humamos fuimos hechos a la imagen y semejanza de Dios, por lo que es posible pedire al Juez Justo que pueda protegernos cuando estamos pasando por momentos de dificultades.
Los hombres que están lejos de su hogar o aquellos que por algún motivo están pasando por situaciones complicadas y peligrosas, pueden pedir al Juez Justo su ayuda, sólo se tiene que pedir con mucha y con gran voluntad.
La oración al Justo Juez para hombres es aquella que le ofrecemos a nuestro señor Jesucristo, quien escucha todas nuestras plegarias cuando se hacen con fe y devoción cuando necesitamos su ayuda para poder superar un peligro que nos está afectando.
En realidad, se trata de una oración que tiene un gran poder, ya que cuando hacemos esa oración con fe, podemos tener la protección del señor.
Cuando hacemos una oración por nuestra protección y por la de alas personas que amamos, es necesario que practiquemos la fe de nuestro Señor. Se trata de una forma de poder hacer nuestras peticiones y de poder agradecer con alabanzas a nuestro Señor.
Oración al Justo Juez para que se haga justicia
Señor, distintos leones y leonas vienen a mi encuentro; deténgase como mi Señor Jesucristo con el Dominus Deo le dijo al Justo Juez: Señor a mis enemigos veo, pues tres veces digo: ojos tengan y que no me vean, manos tengan y que no me toquen, boca tengan y que no me hablen, pies tengan y que no me alcancen, con tres hablo y el corazón parto.
Porque la Santa Camisa en la que tu hijo fue envuelto, es la misma que yo tengo y por ella me veo libro de malas lenguas, presiones, de maleficios y de hechiceros, estando amparado por el Santo Evangelio, pues de ella nació el hijo de Dios, y los enemigos llegaron derrotados a mí, de la misma forma que el Señor derribó a sus enemigos el día de Pascuas.
Dios delante y yo detrás, Jesús, María y José.
Oración para hombre en peligro de sentencia
Espero que mi causa sea justificada con la iluminación del hijo de nuestro Señor, con la del ejercicio celestial y que (decir el nombre de la persona culpable) tome responsabilidad por sus acciones.
¡Oh, Juez Justo! Creador de todo lo que conocemos, Rey del cielo y la tierra, tú que con tu gran virtud llenas nuestras almas y con tu poder de padre nos cuidas.
¡Oh, mi señor redentor, Salvador de todo el universo! Que a trabes de tu infinito amor se encarga de defendernos y cuidarnos de todos nuestros enemigos, que nos guia y que ilumina nuestro camino cuando la oscuridad se acerca. Tú que nos cuidas y que eres nuestra gloria, a través de tu amor infinito nos defiendes en todo momento.
Padre de Jesús, te pido que me concedas una muerte que sea digna y libra de sufrimiento, tormento y dolor, de tu propia muerte en la cruz.
Santo padre, por favor, preparame de la misma forma que protegiste a tus apóstoles y protegeme de la misma forma que protegiste a Santa María Magdalena.
Haz que mi vida sea justa y plena, que tome mejores decisiones, que pueda estar protegido a lo largo de los caminos del peligro, libre de ríos traicioneros, de posesiones y de cualquier tipo de enemigo.
Oración completa para hombre que busca protección
Juez Justo, librame del mal y no me dejes caer en el pecado, porque eso es lo peor que puede hacer una persona de fe como yo.
Despoja todos los poderes malignos de mis enemigos, visibles e invisibles, no permitas que me hagan daño y que consigan dañar mi alma.
No permitas que esté alcance de sus ojos, que con sus pies puedan alcanzarle y con sus manos aprenderme.
Tú que eres mi Juez, te pido que me protejas de sus ataques, de sus palabras, espadas, lanzas y armas de fuego, que me protejas de cualquier medio por el que mis enemigos quieran hacerme daño. Sólo tu puedes protegerme, mi Señor, mi Redentor.
Cúbreme con el manto sagrado, con la Tela Sagrada que cubrió el cuerpo de nuestro salvador. Padre amado, que mi cuerpo esté cubierto y protegido de prisión, lesiones, cautiverio y de la muerte. Que las manos de mis enemigos nunca puedan alcanzarme.
Que mi padre me mantenga libre, que el Hijo me guarde y que el Espíritu Santo me acompañe.
Amén.
