La oración Novena Justo Juez está dirigida hacia nuestro Señor Jesucristo, nuestro Juez ante el Padre Celestial.
Es muy importante tener en cuenta que las oraciones católicas tienen que realizarse completas teniendo una gran fe en ellas y creyendo por completo, ya que de lo contrario las oraciones no tendrán efecto.
Cuando las oraciones no se realizan sin fe, son sólo palabras vacías que estás diciendo y que no llegarán a ningún lugar. Es importante que las palabras se digan creyendo en cada una de ellas y en nuestro Señor.
Son muchas las personas que le piden a nuestro señor Justo, pudiendo llegar a ser muy efectivas cuando se hacen con fe y cuando se creen en ellas.
Asimismo, es necesario tener en cuenta y saber cuáles son los verdaderos motivos por los que se está haciendo la oración. No se debe de hacer esta oración como una simple rutina. Realmente se tiene que hacer por un motivo y desde el fondo de nuestro corazón.
Primer día
¡Oh, Justo Juez! Tú que fuiste blasfemado, juzgado y blasfemado por ordendes de Poncio Pilato, nunca te acobardaste de tu camino, siguiendo para que pudieras pagar por todos nosotros, por todos nuestros pecados.
El día de hoy te imploro que me escuches con ese corazón tan bondadoso que tienes, te imploro que atiendas mis suplicas, ya que yo me presente ante ti con un corazón abierto. De rodillas te ruego que vuelvas tus ojos hacia mí, te alabo padre, Juez Justo.
Segundo día
Juez Justo, tú que todo lo ves y todo lo sabes, en esta ocasión te pido perdón por todos los días que no he alabado tu nombre y al mismo tiempo te pido con mucha humildad y desde el fondo de mi corazón que pongas tu presencia santa en mi alma, en mi casa, en mi familia y en todas las personas que tienen problemas.
Tú eres lo que nos mantiene vivos y con bondad, padre amado. Siempre serás alabado por nosotros desde el fondo de nuestro corazón.
Tercer día
Juez Justo, tú que eres venerado y divino, el día de hoy me arrodillo ante ti para pedir por tu misericordia, para que me mantengas cerca de tu presencia, de tu amor y de tu misericordia, ya que sin ellas me siento perdido.
Yo no soy nada ni nadie, en el mundo no hay ni una sola hoja que se mueva y que no sea por ut infinita bondad, padre amado. Te alabo el día de hoy, mi santo Juez, implorándote que te acerques a mi alma y a la de mi familia, para que mi hogar sea tu hogar y tu padre sea mi padre.
Tú eres el dueño de todo lo que tengo y todo lo que soy.
Cuarto día
Justo Juez, de rodillas me pongo ante ti, rogándote que me ayudes a volver al camino que me acercará más a ti, para que tu luz me pueda guiar por este camino ayudarme a estar más cerca de tu presencia bendita.
Te pido que guíes mis pasos para que estos se puedan acercar cada vez más a ti, siguiendo tus pasos, que con tu bondad infinita me puedas guia para seguir el camino de tu padre.
Quinto día
¡Santo y Justo Juez! Tú todo lo puedes, todo lo ves y todo lo sabes. Te pido clemencia y que perdones todo mal que se haya presentado en mi alma y todo mal que haya hecho. Se que tú eres un padre amoroso y lleno de bondad, por lo que sé que me perdonarás y me dejarás volver al camino de la misericordia para poder estar contigo por siempre.
Eres un padre amoroso y por eso todos creemos en ti y todos recurrimos a ti cuando queremos seguir el camino correcto. Es por eso que te glorificamos y te veneramos en el nombre de nuestro Dios.
Sexto día
Justo Juez, de rodillas vengo ante tu presencia para pedirte que no te alejes de mí, así como no abandonaste la amargura por la que tuviste que pasar para cargar con todos nuestros pecados.
Te pido de rodillas que no dejes mi lado, que no me abandones, pues tu eres mi padre amado y mi Señor venerado, eres la estrella que alumbra mi camino de noche, ayudándome cuando me siento agobiado. Recurro a tu bondad para que me pueda dar la fuerza que necesito para seguir mi camino.
Octavo día
¡Oh, Justo Juez! Tú que te levantaste al tercer día lleno de gloria, te pido que no alejes tu mirada y tu bondad de mi vida, la cual te entrego por completo porque tú eres mi padre amado, mi Justo Juez y todo lo puedes, todo lo sabes y todo lo ves.
Eres un padre amoroso que, a pesar de todos nuestros errores, pasaste por un calvario por nosotros y siempre nos has demostrado tu amor infinito.
Padre amado, por favor jamás me alejas de tu lado, tú que siempre has estado conmigo y que siempre has perdonado mis pecados.
Noveno día
Justo Juez, tú que eres muy justo mantenme a tu lado y no me apartes de él para que puedas recorrer el camino a tu lado y así no caiga en ningún pecado.
Mientras me mantenga bajo el consuelo de tu gracias y de tu bendita mirada sé que mi alma será bendecida y alargada. Es por eso que en esta ocasión te imploro que no me alejes de tu vida, te imploro que me mantengas cerca para que pueda estar contigo durante toda mi vida.
Aquel que cree en ti y que te ama nunca morirá, viviendo siempre contigo y en la casa de tu padre.
En el nombre de la santísima trinidad, Amen.
¿Qué es y en qué consiste la Oración del Justo Juez?
Jesucristo es nuestro Justo Juez, nuestro amigo y nuestro hermano. Le podemos pedir muchas cosas, siendo una de las peticiones más comunes su protección, tanto para nosotros como para nuestros seres amados.
Muchas personas realizan esa oración todos los días, ya que de el mal siempre está asechando y de esta forma se quieren mantener a salvo, teniendo la protección del Juez Justo tanto en su casa como fuera de ella.
Es una oración que se tiene que hacer desde el fondo de nuestro corazón, ya que en ella ponemos en la mano de nuestro señor nuestra vida y la vida de toda nuestra familia.
Hacer esta oración al comenzar el día, antes de nuestra jornada de todos los días, junto con nuestra familia antes de desayunar es muy recomendado, además de que es una práctica que sirve para unir a la familia, pudiendo pedir al Padre en nombre de Jesús para que nuestras oraciones consigan llegar hasta sus oídos que se encuentran ene los cielos.
Esta novena no tiene el séptimo día de el sexto pasa al octavo día por favor la pueden poner gracias