Se trata de una oración a través de la cual vamos a tener la oportunidad de pedir la ayuda al corazón de Jesucristo, para poder solicitar apoyo durante un momento o situación complicada en nuestra vida.
Asimismo, esta oración también será de gran utilidad para poder superar nuestras debilidades y así poder perdonar el mal del que hemos sido victimas en nuestra vida.
Oración a la divina misericordia para pedir ayuda en casos difíciles
Oh Señor, te ruego que me ayudes, que mis ojos sean misericordiosos, para que así nunca recele o juzgue la apariencia de los demás, sino para que pueda buscar todo lo que es bello en el alma de mis prójimos y para que pueda acudir en su ayuda.
Señor, que mis oídos sean misericordiosos para que pueda tener en cuenta las necesidades del prójimo y que no sea indiferente ante sus penas y sus quejidos.
Señor, te ruego que me ayudes, para que mi lengua sea misericordiosa, para que nunca hable mal de los demás, sino que tenga pura palabra de consuelo y perdón para las demás personas.
Señor, te ruego que me ayudes para que mis manos sean misericordiosas, para que estén llenas de buenas obras, para que sepa cómo hacer solo el bien a los demás, y para que cargue sobre mí con las tareas más complicadas y más penosas.
Señor, te ruego que me ayudes para que mis pies sean misericordiosos, para que siempre me apresuré a ayudar a los demás, para que, dominado por mi cansancio y mi fatiga, pueda hacerlo. Que mi reposo verdadero se encuentre en servir a los demás.
Señor, te ruego que me ayudes para que mi corazón sea misericordioso, para que pueda sentir el sufrimiento de los demás. Para que a nadie le rehúse mi corazón. Siempre seré sincero con los demás, con todos quienes abusen de mi bondad. Me encerrare en tu corazón, soportaré tu sufrimiento en silencio.
Oh Señor, te pido que dentro de mí, tú puedas mandar y ejercitar los tres grados de la misericordia:
El primero, la obra de la misericordia, sin importar de qué tipo sea.
El segundo, la palabra de la misericordia; si no puedo llevar a cabo una obra de misericordia, daré ayuda con mis palabras.
El tercero, la oración. Si no puedo mostrar misericordia por medio de obras o de mis palabras, siempre la mostraré a través de la oración.Mi oración llegará hasta donde yo no puedo llegar físicamente.
Oh, Jesús de mi corazón, te pido que me transformes en ti, porque tú puedes hacerlo todo.Jesús, confío en ti.
Amén.
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